¿Qué utilidad saca el sistema de Greta Thunberg?

Aunque existan primos de Rajoy el cambio climático, o mejor en su modo no eufemístico, el calentamiento global es una realidad. Se derriten los polos, tenemos cambios en las estaciones, cambios que estamos notando, nosotros y la naturaleza etc

Además el capitalismo se basa en acumular lo máximo posible a través de la explotación de los trabajadores y los recursos naturales. Lo máximo posible.

La huella ecológica de países como EEUU corresponde a cinco planetas; ojo, la de Suecia a tres.

Imagen: El “ecologista” Arnold Schwarzenegger y Greta Thunberg.

En un sistema que se basa en conseguir la máxima acumulación y en plena fase imperialista, controlar al movimiento ecologista, cooptarlo es fundamental para el avance de su expansión. Ayudará no solo establecer movimientos políticos controlados en el centro imperialista sino también a determinar las políticas de los países en desarrollo. Algo fundamental porque ya hace años que en las fábricas de pensamiento de las universidades occidentales se trabaja por impedir a toda costa el desarrollo de terceros, que significa a efectos prácticos la no dependencia de los países del centro imperialista y por tanto su soberanía.

Seguir viviendo del resto y de los restos del planeta mientras impiden el desarrollo de los demás: antidesarrollismo, decrecimiento y otras patochadas posmodernas, unido a críticas a modelos políticos y económicos que busquen el desarrollo sostenible. Por ejemplo críticas a las renovables según el país que las desarrolle. Garantizando así que su modo de vida no se vea afectado ya que ostentan un control total sobre cómo manejar la situación a nivel global.

Por último, y esto ya lo hemos visto con el movimiento feminista, sirve para desarrollar un mercado “solidario” en base a marcas “ecofriendly” o “gender perspective”. Incidiendo en la construcción de una ideología social que asuma que la lucha contra el destrozo del planeta está encauzada. Convirtiendo la necesaria lucha en simple e inocua moda. Insisto, esto ya lo hicieron con el feminismo y por los mismos motivos: Necesitaban poder controlar el cuerpo de las mujeres para el avance del capital; ahora necesitan controlar la gestión de la crisis ambiental para garantizar sus beneficios.

Mucho cuidado en el movimiento ecologista que vienen curvas…

Carmen Parejo

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Directora Revista La Comuna

Estudió Filología Hispánica en la Universidad de Sevilla. Gestora cultural, escritora, poeta y analista internacional en distintos medios escritos o audiovisuales. Autora de la compilación poética “La Generación de la Sangre I” para Editorial Ultramarina Cartonera, a través de la Plataforma de Artistas Chilango-andaluza.

“Arquitecturas y Mantras” de la Editorial Bucéfalo fue su primer libro de poesía en solitario. A su vez, actualmente colabora en Hispan TV y otros medios internacionales en habla hispana analizando la actualidad política. Miembro de la Asociación Cultural Volver a Marx. Milita en Trabajadoras Andaluzas.