“Este Bicentenario de la Batalla de Carabobo encuentra a los pueblos americanos en una coyuntura similar a la que vivieron los Padres Libertadores”

    “Carabobo es principio y fin.”

    Hugo Chávez Frías

    Este Bicentenario de la Batalla de Carabobo encuentra a los pueblos americanos en una coyuntura similar a la que vivieron los Padres Libertadores: un escenario cambiante donde la reacción avanza o retrocede, donde se consolidan victorias populares o bien el nuevo colonialismo, el imperialismo norteamericano, hace volver al redil a naciones enteras. Tal era la dinámica en la América del Sur desde 1809 hasta la Victoria de Ayacucho en 1826.

    Con la victoria en Carabobo se quebró el espinazo de las tropas realistas en el actual territorio de Venezuela. Esto permitió reanudar la Campaña del Sur: las batallas de Bomboná, Pichincha y Junín fueron jalones que construyeron la definitiva victoria de Ayacucho. Simón Bolívar culminaría una campaña militar inigualada en el mundo.

    Nadie mejor que el Comandante Hugo Chávez Frías para justipreciar tamaño hecho histórico:

    “A partir de Carabobo lo que está planteado es proseguir la guerra hacia el sur para ‘redondear’ a Colombia: todas las acciones las dirige hacia un mismo objetivo político: abrir caminos a la Nación Suramericana y en ese sentido adelante a Sucre en la Campaña del Sur. Carabobo, por tanto, es un potente faro de luz que nos enseña la estrategia incomparable de Bolívar en esa espiral histórica que es la revolución de la América antes española. Carabobo descubre, de otro lado, el fuego patrio, la inclinación a la inmolación y el heroísmo de nuestro pueblo en los campos de batalla: nos evoca el difícil camino de la gloria recorrido por nosotros y nos sugiere hasta dónde debe llegar nuestro sacrificio por la Patria.”

    “Carabobo…es punto culminante de una historia gloriosa en una marcha de siglos…; marcha para propiciar y realizar cambios estructurales porque la renovación moral del hombre solo es posible con la renovación moral del hombre solo es posible con la renovación global del pueblo.”

    “La acción de armas de Carabobo fue una batalla inmortal del pueblo uniformado por su pueblo: nos inspira profundos sentimientos de iluminación del porvenir; nos evoca el sublime heroísmo de los hombres que concurrieron a la Sabana Inmortal para decir con Bolívar al mundo entero que el servicio a la Patria, la gloria, el honor, el talento y el sacrificio se reúnen en el solo punto del triunfo de Venezuela, de su fuerza armada y de la verdadera libertad de América.”[i]

    La obra libertadora de Simón Bolivar confluiría con la que venía llevando adelante el General José de San Martín, quien desde el sur del continente había liberado Chile y Perú. En el Encuentro de Guayaquil San Martín cede sus tropas a Bolívar para que culmine la obra liberadora. Se retira al carecer del apoyo de Buenos Aires, al momento más preocupada por las reyertas intestinas que en la obra de la liberación americana.

    Bolívar y San Martín son figuras históricas de una tremenda fuerza simbólica a la idea de la construcción de la Patria Grande Latinoamericana. En ese sentido, la Batalla de Carabobo nos inspira a redoblar esfuerzos para la consolidación de los procesos progresistas y revolucionarios, para seguir resistiendo a brutales “virreyes” neoliberales y dejar atrás dos siglos de amargura y humillación.

    [i] Hugo Chávez Frías. Fragmentos de su Carta al Comandante General del Ejército con motivo del 180 Aniversario de la Batalla de Carabobo y Día del Ejército Libertador.

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    Comenzó a militar en 1982, en la Federación Juvenil Comunista, cuando Argentina aún era gobernada por la dictadura cívico - militar.

    En 1986/87 es enviado a la República Democrática Alemana a estudiar en la Escuela Superior de la Juventud "Wielhem Pieck" durante 10 meses.

    Psicólogo desde 1990 se focalizó en el trabajo con adicciones.

    Autor de "El hombre nuevo, la mujer nueva: ensayo sobre la transformación revolucionaria de la personalidad" (2002) y "Marxismo, caos y complejidad" (2008), "Psicología y Marxismo" (2017).

    En el año 2013 realizó conversatorios en Venezuela, sobre todo en el Estado Aragua donde se trabajaron los temas antemencionados. Desde febrero de 2014 y durante 6 meses desarrolló tareas de formación en todo el territorio venezolano convocado por la Escuela de Formación Argimiro Gabaldón. En ese marco asiste a las reuniones de formación de cuadros revolucionarios junto al diputado Jesús Faría.

    En 2018 funda la Escuela Latinoamericana de Formación Hombre Nuevo Mujer Nueva.