Wael Alfaqeeh.

En la pasada madrugada del 28 de junio las fuerzas criminales de ocupación Israelí entraban en casa del activista palestino Wael Alfaqeeh para llevárselo detenido.

Wael organiza la Asociación cultural Tanweer en el Nablus, norte de Cisjordania. Miembros de La Comuna tuvieron la suerte de poder compartir y aprender de él en las Brigadas de la Aceituna. No hace un año que liberaron a Wael de su última estancia en las cárceles israelíes.

¡Libertad Wael, libertad para todos los presos políticos!

“Algunas personas hablan de la “Palestina ocupada” como si una parte de esa maravillosa tierra no lo estuviera. Muchos/as no entedemos ese término, puesto que toda Palestina sufre el yugo del engendro criminal sionista y antisemita al que pusieron el nombre de Israel.
El ejército de ese ente criminal, como suele hacer a diario con la población palestina, sean niños/as o adultos/as, ha vuelto a secuestrar a nuestro habibi Wael.
No podrán esconder su sonrisa. No podrán acabar con sus ganas de bromear y de compartir lo poco de lo que disponga. No podrán apagar el amor que desprende y que lo inunda todo. Y, sobre todo, no podrán exterminar su lucha y la de su pueblo que acabará venciendo a los criminales que llevan 100 años sometiéndolos a genocidio, apartheid y humillaciones a diario.
Fuerza habibi. Estamos contigo. Estamos con vosotros/as.
¡Viva Palestina Libre!”
Juani Boto Garrido.

Nuestros compañeros Juani Boto y Ámala Fernández Iglesias con Wael Alfaqeeh.

Fragmento poema Carta desde el Zoco de los cesantes del poeta palestino Samih Al-Qasim.

(…) “Tal vez me puedas arrancar hasta el último palmo de mis tierras.
Tal vez mi mocedad alimente la cárcel.
Tal vez robes la herencia de mi abuelo:
los muebles,
las vajillas,
y los cántaros.
Tal vez quemes mis versos y mis libros.
Tal vez mi carne arrojes a los perros.
Tal vez en nuestra aldea permanezcas
como una espantosa pesadilla.
¡Enemigo del sol!
Mas no transigiré
Resistiré
hasta el último pulso de mis venas.” (…)